Argentina: Normativa complica el transporte de papa andina

Argentina: Normativa complica el transporte de papa andina
Agosto 03, 2018

Días atrás el Senasa determinó, a través de una disposición conjunta publicada en el Boletín Oficial, el uso obligatorio del Documento de Tránsito Vegetal (DTV) para hortalizas pesadas. El registro será exigido para el traslado en fresco de raíces, bulbos y tubérculos que tengan tránsito federal, es decir, que se transporten entre provincias.

De esta manera batata, papa, cebolla y ajo deberán dar cuenta de su zona de origen y trazabilidad cuando el documento entre en vigencia a mediados de octubre. También los tubérculos andinos deberán presentar DTV, lo que significa una complicación importante para este sector del norte del país que posee otras lógicas de producción.

En la provincia de Jujuy la producción andina de tubérculos se realiza en zonas alejadas del único empaque habilitado que se encuentra en la ciudad, es decir a unos 300 kilómetros (distancia aproximada entre La Quiaca y San Salvador de Jujuy). Al ser pequeños productores, muchos deben acopiar la mercadería para poder comercializarla, ya que la papa no proviene de un solo lugar. La producción se reúne en la puna y luego se empaca en la ciudad.

Desde Revista InterNos consultamos a Silvana Morel, abogada y contacto comercial de una empresa que opera en el Mercado de Abasto de Córdoba sobre el impacto que la implementación del DTV tendría en este sector. “Los productores indígenas son siempre pequeños productores. Será una exigencia muy grande para una producción ancestral. Son lógicas de producción diferentes”, explicó.

El objetivo del DTV es verificar la trazabilidad de los productos con su identificación, origen y destino final para resguardar así el estatus fitosanitario argentino y cuidar la salud del consumidor.

Para Morel, el principal problema en su ejecución es que “en las zonas de producción no existe la infraestructura que exige el DTV”. Una alternativa, plantea, sería emitir este documento desde la zona de empaque ubicada en la ciudad, pero de esta manera no se respetaría la exigencia esencial del documento, que es generar trazabilidad con el lote.

La abogada explica que actualmente las papas andinas que se despachan al resto del país lo hacen desde los galpones de empaque habilitadas con una guía que identifica a la producción. Pero en el caso de implementarse el DTV el proceso se complejizará, ya que se buscará dar cuenta del lugar exacto de donde sale la mercadería y a qué productor corresponde.

“Será una exigencia muy grande para una producción ancestral. Son lógicas de producción diferentes”

Vale decir que las políticas aplicadas sobre los pequeños y medianos productores necesitan incorporar una mirada que comprenda los procesos históricos y culturales vinculados a sus sistemas productivos, para asegurar su permanencia en el tiempo sin que eso represente “obviar” controles sanitarios estrictos frente a las irregularidades en los sistemas productivos.

La implementación del DTV en Argentina tiene defensores y detractores. Gran parte del sector entiende que este requisito cumple una tarea trascendental en el cuidado de la salud poblacional mediante la fiscalización de los alimentos que circulan en nuestro país. Sin embargo, algunos operadores de mercado consideran que su implementación está enfocado estrictamente hacia los puestos mayoristas y no tanto a los controles de los camiones en ruta, perjudicando directamente a los comercializadores al decomisar la mercadería una vez ingresada al mercado. Por otro lado, no son pocos los productores que se sienten “agobiados” por estos controles y exigencias que no ven retribuidas en el quehacer diario del organismo.