Honduras: Cosecha de papa mueve la economía en Intibucá
Cosecha de papa mueve la economía en Intibucá.
El cultivo de papa mueve la economía en sectores de Intibucá, con alta generación de empleos y el aporte hacia la seguridad alimentaria, destacaron productores de la zona.
Según el productor de Chilingatoro, zona occidente de Honduras, Óscar Bonilla, en la actualidad se ha elevado el costo de este alimento debido a poca producción, pero cuando se sume la cosecha de Ocotepeque, la tendencia sería a la baja.
La papa de Intibucá es de buena calidad al extremo que dura hasta tres meses en almacenamiento, resaltó Bonilla, quien administra una parcela de cuatro manzanas en un sector ubicado a 1,850 metros sobre el nivel del mar.
En mercados de Tegucigalpa, la libra de papa se cotiza a 18 lempiras, mientras al por mayor, el quintal de producto de primera, tamaño grande, transportado desde La Esperanza se vende a 1,300 lempiras en el mercado zonal Belén o Mayoreo.
Por su parte, el quintal con papa mediana se ofrece a 600 lempiras en bodegas de ese mercado capitalino.
Óscar Bonilla aprovechó para pedirle al gobierno que regule importaciones de papa desde Guatemala para no afectar la producción nacional de decenas de familia que viven de este cultivo.
La papa con nombre científico Solanum tuberosum, perteneciente a la familia de las solanáceas, es un cultivo de mucho impacto que genera 5,800 empleos permanentes en Honduras, la principal fuente de ingresos en el área rural.
En Honduras se siembran unas 2,900 manzanas de papa al año, en el altiplano de Intibucá, partes altas de Ocotepeque y de La Paz.
Un 90 por ciento de esa producción se destina para consumo y el resto para semilla, aún así, el país es importador debido a que la cosecha nacional no satisface la demanda interna, sumado también al aumento de la población.
Según el productor de Chilingatoro, zona occidente de Honduras, Óscar Bonilla, en la actualidad se ha elevado el costo de este alimento debido a poca producción, pero cuando se sume la cosecha de Ocotepeque, la tendencia sería a la baja.
La papa de Intibucá es de buena calidad al extremo que dura hasta tres meses en almacenamiento, resaltó Bonilla, quien administra una parcela de cuatro manzanas en un sector ubicado a 1,850 metros sobre el nivel del mar.
En mercados de Tegucigalpa, la libra de papa se cotiza a 18 lempiras, mientras al por mayor, el quintal de producto de primera, tamaño grande, transportado desde La Esperanza se vende a 1,300 lempiras en el mercado zonal Belén o Mayoreo.
Por su parte, el quintal con papa mediana se ofrece a 600 lempiras en bodegas de ese mercado capitalino.
Óscar Bonilla aprovechó para pedirle al gobierno que regule importaciones de papa desde Guatemala para no afectar la producción nacional de decenas de familia que viven de este cultivo.
La papa con nombre científico Solanum tuberosum, perteneciente a la familia de las solanáceas, es un cultivo de mucho impacto que genera 5,800 empleos permanentes en Honduras, la principal fuente de ingresos en el área rural.
En Honduras se siembran unas 2,900 manzanas de papa al año, en el altiplano de Intibucá, partes altas de Ocotepeque y de La Paz.
Un 90 por ciento de esa producción se destina para consumo y el resto para semilla, aún así, el país es importador debido a que la cosecha nacional no satisface la demanda interna, sumado también al aumento de la población.
Bron
La Tribuna.hn
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