La mosca blanca es el mejor vector de uno de los virus que más afecta a la papa

La mosca blanca es el mejor vector de uno de los virus que más afecta a la papa

La mosca blanca es el mejor vector de uno de los virus que más afecta a la papa

Diciembre 04, 2014

Resumen de la conferencia magistral “Mosca Blanca: El mejor vector del PYVV” que Edisón Torrado-León, Profesor asociado, Facultad de Ciencias Agrarias, Universidad Nacional de Colombia, presentó en el XXVI Congreso bienal de la Asociación Latinoamericana de la Papa (ALAP), celebrado en Bogotá entre el 28 de septiembre y el 2 de octubre de 2014. La “mosca blanca” o también conocida como “mosca blanca de los invernaderos” Trialeurodes vaporariorum (Westwood) (Hemiptera: Aleyrodidae), es una importante plaga que causa daños significativos a los cultivos agrícolas. Tiene una amplia distribución en diferentes regiones del mundo y es conocida por agricultores, asistentes técnicos y especialistas de la biología, ecología, comportamiento y manejo, debido a su gran capacidad polifágica, es decir la habilidad que tiene de alimentarse de diferentes especies de plantas que pertenecen a una abundante variedad de familias, así como por su estrategia reproductiva sexual y asexual, su dispersión y su capacidad de búsqueda del alimento, entre otras. Se consideran como insectos de ciclo de vida con metamorfosis intermedia, debido a que pasan por un instar ninfal conocido como “pupa”, sin llegar a serlo en el sentido estricto de los insectos holometábolos o con metamorfosis completa. Pasan por los estados de huevo, cuatro instares ninfales (este último tiene una fracción de tiempo en pupa, antes de pasar al adulto) y los adultos macho y hembra. Tanto las ninfas como los adultos se alimentan de líquidos de la planta, que después de introducir sus piezas bucales de ingestión conocidos como estiletes hasta el floema, extraen continuamente la savia elaborada que circula por éste. Como consecuencia de la alimentación se generan tres tipos de problemas, uno directo y dos indirectos. El directo se produce como resultado de la continua succión de la savia elaborada, lo que le disminuye a la planta su capacidad de entrega de nutrientes, conduciéndola a un debilitamiento que conlleva a una importante reducción de la producción. Por su parte, los daños indirectos, es decir aquellos causados por otros organismos producto de la presencia de las moscas blancas, se dan en dos vías; por un lado, debido a alimentación continua las ninfas y adultos generan cuantiosas excreciones líquidas que son ricas en azúcares, denominadas por esta razón como “miel de rocío”, esas microgotas por gravedad caen y se acumulan en las diferentes superficies de la planta, lo que sirve de alimento a un complejo de hongos conocidos como “fumaginas” por su particular color oscuro. Como consecuencia, la planta reduce dramáticamente su capacidad fotosintética y por lo tanto la producción de energía. El otro daño indirecto de la presencia de la mosca blanca Trialeurodes vaporariorum en cultivos agrícolas, que también está relacionado con la alimentación, es que éstas se convierten en transportadores o vectores pasivos de importantes virus de plantas; este es el caso de la mosca blanca con el virus del amarillamiento de las venas de la papa (PYVV por sus siglas en inglés). Esta enfermedad puede generar disminución considerable en la producción y es transmitida también a través de tubérculo semilla infectada. El PYVV pertenece al género Crinivirus y a la familia de virus conocidos como Closteroviridae, nombre que es dado porque tiene forma de cordel o cordón. La razón de su aspecto es un factor muy importante y tiene una relación directa con el sitio de ubicación para ser transportado: el floema. Así, el virión o la partícula de virus individual que tiene capacidad infecciosa en forma de cordel se mueve fácilmente por el haz vascular y es en este sitio que es ingerido por las moscas blancas, una vez llegan con su estilete para tomar la savia. Los artrópodos con aparatos picadores chupadores tienen como estrategia liberar saliva en el sitio donde se alimentan, para posteriormente ingerir los líquidos, lo que no ocurre con las plagas masticadoras como lepidópteros o coleópteros. En este proceso también toman alimento más parte de la saliva. Este intercambio de saliva-alimento es lo que le conviene al virus para pasar a una nueva planta no infectada. La estrategia de manipulación del virus a la mosca blanca se inicia con una de sus características sobresalientes y es el aspecto amarillo de las hojas, de donde proviene el nombre de virus del amarillamiento de las venas de la papa. Esto se da debido a que los viriones degeneran los cloroplastos y mitocondrias, lo que trae como consecuencia la alteración del metabolismo y la respiración. Para los adultos de la mosca blanca el color amarillo tienen un significado importante en la búsqueda del recurso, debido a que esta es una estrategia de ahorro de energía para localizar el alimento. La especie Trialeurodes vaporariorum tiene atracción hacia longitudes de onda de 540 nm, correspondiente al amarillo, es decir que de la reflexión del color verde de la hojas, solo perciben el amarillo (el verde es la mezcla de los colores primarios amarillo y azul). La atracción hacia las plantas con el virus que expresan el color amarillo es más fuerte y de esta manera toman rápidamente contenidos de savia más el virus. Otra manipulación del virus con las moscas blancas está relacionada con la obstrucción del floema que le producen a las plantas. Como consecuencia, los adultos permanecen menos tiempo en esta y salen a buscar nuevas plantas sanas, así el virus se distribuye rápidamente a plantas sanas. La mosca blanca es el mejor vector del PYVV porque tiene alta movilidad, se deja “seducir” con atrayentes de color amarillo y es capaz de tomar el virus y depositarlo en nuevas plantas para que este se perpetúe.

Torrado-León, Edison1 1 Profesor asociado, Facultad de Ciencias Agrarias, Universidad Nacional de Colombia, sede Bogotá. Director Proyecto EntomA – Entomología en Acción, de NaturaVisión. E-mail: edisontorrado@naturavision.com

Foto: Universidad de Illinois

Sponsored Content